Se presentan para la JMJ de Lisboa.
Rock band that performed at six WYD’S
Se presentan para la JMJ de Lisboa.
Rock band that performed at six WYD’S
Ayer el Papa Francisco celebró la liturgia penitencial con jóvenes presos y presidió el Vía Crucis en el Campo Santa María, donde pronunció una oración a Dios Padre al finalizar las catorce estaciones.
Programa e intervenciones del viaje apostólico del Santo Padre a Panamá para la XXXIV Jornada Mundial de la Juventud (23-28 de enero de 2019).
Miércoles, 23 de enero de 2019
9.35 Salida en avión desde Roma/Fiumicino hacia Panamá.
16.30 Llegada al Aeropuerto Internacional Tocumen de Panamá. Acogida oficial.
16.50 Transporte hacia la Nunciatura Apostólica.
Jueves, 24 de enero de 2019
9.45 Ceremonia de bienvenida en la entrada principal de la Presidencia de la República (Palacio de las Garzas).
10.00 Visita al presidente de la República en la Presidencia de la República (Palacio de las Garzas).
11.15 Encuentro con los obispos centroamericanos en la iglesia de S. Francisco de Asís.
17.30 Ceremonia de acogida y apertura de la JMJ en el Campo Santa María la Antigua.
Viernes, 25 de enero de 2019
11.50 Transporte en helicóptero a la Nunciatura Apostólica.
17.30 Vía Crucis con los jóvenes en el Campo Santa María la Antigua.
Sábado, 26 de enero de 2019
9.15 Santa Misa con la dedicación del altar de la Catedral Basílica de Santa María la Antigua con los Sacerdotes, los Consagrados y los Movimientos Laicales.
12.15 Comida con los jóvenes en el Seminario Mayor San José.
18.30 Vigilia con los jóvenes en el Campo San Juan Pablo II.
Domingo, 27 de enero de 2019
8.00 Santa Misa para la Jornada Mundial de la Juventud en el Campo San Juan Pablo II.
10.45 Visita a la casa hogar Buen Samaritano. Ángelus.
16.30 Encuentro con los voluntarios de la JMJ en el Estadio Rommel Fernández.
18.00 Ceremonia de despedida en el Aeropuerto Internacional Tocumen de Panamá.
18.15 Salida en avión hacia Roma.
https://opusdei.org/es-es/article/papa-francisco-jornada-mundial-juventud-panama-2019/
El Papa en el avión se emociona al recordar un periodista fallecido
Puedes seguir toda la Jornada Mundial de la Juventud a través de una aplicación de Rome Reports
Yihuaa Lo, es una de los millones de peregrinos que fueron a la Jornada Mundial de la Juventud de Cracovia. Es de Taiwuan. Actualmente vive en Esplugues de Llobregat por motivos de trabajo. Ha viajado mucho por todo el mundo. Sus padres son budistas y se convirtió tras un proceso largo de catequesis, fruto de una inquietud sobre quien era Dios. Fue bautizada como Maria Ester a los 21 años y decidió participar en esta Jornada para estar unida al Papa y la Iglesia. La hemos entrevistado para que nos cuente sus impresiones (hay que tener en cuenta que todavía no domina totalmente el español):
¿Cómo ha ido esta experiencia?
– Ha sido increíble, inolvidable, para toda la vida
¿Qué conclusiones has sacado de estos días junto al Papa y a tantos jóvenes?
– Me han impresionado los testimonios de sus conversiones en la vigilia de oración y cómo el Papa habló de dejar huella, de realizar tu sueño en la vida, de involucrarnos en la historia. He visto jóvenes de diferentes países durmiendo en el mismo sitio, todos con el mismo motivo, para esta allí, la fe, para construir un mundo de misericordia.
¿Qué dificultades encontrasteis?
– Fueron en general dificultades de necesidades vitales. No conocíamos Cracovia; todo estaba colapsado. Hemos recordado a los refugiados, porque nos sentíamos como ellos, porque teníamos necesidades, pero ellos las tienen siempre. Hemos rezado también mucho por ellos porque teníamos que andar kilómetros y kilómetros y no era nada en comparación con lo que ellos hacen. Hacía calor, llovía, de todo. No entendíamos el idioma. Los polacos son muy piadosos y también muy generosos, nos dejaban duchar en los hostales. Dios es bueno y te da la impresión de que quiere perdonar a todos. De todas formas estas dificultades no fueron nada con la alegría de oír al Papa y de estar con tantos jóvenes.
Teresa Cardona, se dedica a la educación. Es de Barcelona. Iba con un grupo de jóvenes. A ella también le hicimos las mismas preguntas.
¿Cómo ha ido esta experiencia?
– Única inolvidable, la más fuerte de toda mi vida
¿Qué conclusiones has sacado de estos días junto al Papa y a tantos jóvenes?
– Que vale la pena seguir a Cristo. La fuerza y claridad del mensaje del Papa, nos da un ejemplo y un impulso importante de cómo vivir la misericordia. Impresiona ver jóvenes de todo el mundo siguiendo el mismo mensaje.
¿Qué dificultades encontrasteis?
– Fue una experiencia dura a nivel logístico. Estar alojados en tiendas de campaña tantos días, lloviendo, con barro, sin casi poder asearte. La ciudad no estaba preparada para tanta gente. No había autobuses, no había suficiente comida. A pesar de todo para todo el grupo esto a pasado a ser anecdótico. Es una experiencia que vale la pena haberla vivido.
Después de la JMJ de Cracovia, el Papa Francisco va a Asís
Queridos jóvenes: habéis venido a Cracovia para encontraros con Jesús. Y el Evangelio de hoy nos habla precisamente del encuentro entre Jesús y un hombre, Zaqueo, en Jericó (cf. Lc 19,1-10). Allí Jesús no se limita a predicar, o a saludar a alguien, sino que quiere —nos dice el Evangelista— cruzar la ciudad (cf. v. 1). Con otras palabras, Jesús desea acercarse a la vida de cada uno, recorrer nuestro camino hasta el final, para que su vida y la nuestra se encuentren realmente.
Tiene lugar así el encuentro más sorprendente, el encuentro con Zaqueo, jefe de los «publicanos», es decir, de los recaudadores de impuestos. Así que Zaqueo era un rico colaborador de los odiados ocupantes romanos; era un explotador de su pueblo, uno que debido a su mala fama no podía ni siquiera acercarse al Maestro. Sin embargo, el encuentro con Jesús cambió su vida, como sucedió, y cada día puede suceder, con cada uno de nosotros. Pero Zaqueo tuvo que superar algunos obstáculos para encontrarse con Jesús: al menos tres, que también pueden enseñarnos algo a nosotros.
El primero es la baja estatura: Zaqueo no conseguía ver al Maestro, porque era bajo. También nosotros podemos hoy caer en el peligro de quedarnos lejos de Jesús porque no nos sentimos a la altura, porque tenemos una baja consideración de nosotros mismos. Esta es una gran tentación, que no sólo tiene que ver con la autoestima, sino que afecta también la fe. Porque la fe nos dice que somos «hijos de Dios, pues ¡lo somos!» (1 Jn 3,1): hemos sido creados a su imagen; Jesús hizo suya nuestra humanidad y su corazón nunca se separará de nosotros; el Espíritu Santo quiere habitar en nosotros; estamos llamados a la alegría eterna con Dios. Esta es nuestra «estatura», esta es nuestra identidad espiritual: somos los hijos amados de Dios, siempre. Entendéis entonces que no aceptarse, vivir infelices y pensar en negativo significa no reconocer nuestra identidad más auténtica: es como darse la vuelta cuando Dios quiere fijar sus ojos en mí; significa querer impedir que se cumpla su sueño en mí. Dios nos ama tal como somos, y no hay pecado, defecto o error que lo haga cambiar de idea. Para Jesús —nos lo muestra el Evangelio—, nadie es inferior y distante, nadie es insignificante, sino que todos somos predilectos e importantes: ¡Tú eres importante! Y Dios cuenta contigo por lo que eres, no por lo que tienes: ante él, nada vale la ropa que llevas o el teléfono móvil que utilizas; no le importa si vas a la moda, le importas tú. A sus ojos, vales, y lo que vales no tiene precio.
Cuando en la vida sucede que apuntamos bajo en vez de a lo alto, nos puede ser de ayuda esta gran verdad: Dios es fiel en su amor, y hasta obstinado. Nos ayudará pensar que nos ama más de lo que nosotros nos amamos, que cree en nosotros más que nosotros mismos, que está siempre de nuestra parte, como el más acérrimo de los «hinchas». Siempre nos espera con esperanza, incluso cuando nos encerramos en nuestras tristezas, rumiando continuamente los males sufridos y el pasado. Pero complacerse en la tristeza no es digno de nuestra estatura espiritual. Es más, es un virus que infecta y paraliza todo, que cierra cualquier puerta, que impide que la vida se reavive, que recomience. Dios, sin embargo, es obstinadamente esperanzado: siempre cree que podemos levantarnos y no se resigna a vernos apagados y sin alegría. Porque somos siempre sus hijos amados. Recordemos esto al comienzo de cada día. Nos hará bien decir todas las mañanas en la oración: «Señor, te doy gracias porque me amas; haz que me enamore de mi vida». No de mis defectos, que hay que corregir, sino de la vida, que es un gran regalo: es el tiempo para amar y ser amado.
Zaqueo tenía un segundo obstáculo en el camino del encuentro con Jesús: la vergüenza paralizante. Podemos imaginar lo que sucedió en el corazón de Zaqueo antes de subir a aquella higuera, habrá tenido una lucha afanosa: por un lado, la curiosidad buena de conocer a Jesús; por otro, el riesgo de hacer una figura bochornosa. Zaqueo era un personaje público; sabía que, al intentar subir al árbol, haría el ridículo delante de todos, él, un jefe, un hombre de poder. Pero superó la vergüenza, porque la atracción de Jesús era más fuerte. Habréis experimentado lo que sucede cuando una persona se siente tan atraída por otra que se enamora: entonces sucede que se hacen de buena gana cosas que nunca se habrían hecho. Algo similar ocurrió en el corazón de Zaqueo, cuando sintió que Jesús era de tal manera importante que habría hecho cualquier cosa por él, porque él era el único que podía sacarlo de las arenas movedizas del pecado y de la infelicidad. Y así, la vergüenza paralizante no triunfó: Zaqueo —nos dice el Evangelio— «corrió más adelante», «subió» y luego, cuando Jesús lo llamó, «se dio prisa en bajar» (vv. 4.6.). Se arriesgó y actuó. Esto es también para nosotros el secreto de la alegría: no apagar la buena curiosidad, sino participar, porque la vida no hay que encerrarla en un cajón. Ante Jesús no podemos quedarnos sentados esperando con los brazos cruzados; a él, que nos da la vida, no podemos responderle con un pensamiento o un simple «mensajito».
Queridos jóvenes, no os avergoncéis de llevarle todo, especialmente las debilidades, las dificultades y los pecados, en la confesión: Él sabrá sorprenderos con su perdón y su paz. No tengáis miedo de decirle «sí» con toda la fuerza del corazón, de responder con generosidad, de seguirlo. No os dejéis anestesiar el alma, sino aspirad a la meta del amor hermoso, que exige también renuncia, y un «no» fuerte al doping del éxito a cualquier precio y a la droga de pensar sólo en sí mismo y en la propia comodidad.
Después de la baja estatura y la vergüenza paralizante, hay un tercer obstáculo que Zaqueo tuvo que enfrentar, ya no en su interior sino a su alrededor. Es la multitud que murmura, que primero lo bloqueó y luego lo criticó: Jesús no tenía que entrar en su casa, en la casa de un pecador. ¿Qué difícil es acoger realmente a Jesús, qué duro es aceptar a un «Dios, rico en misericordia» (Ef 2,4). Puede que os bloqueen, tratando de haceros creer que Dios es distante, rígido y poco sensible, bueno con los buenos y malo con los malos. En cambio, nuestro Padre «hace salir su sol sobre malos y buenos» (Mt 5,45), y nos invita al valor verdadero: ser más fuertes que el mal amando a todos, incluso a los enemigos. Puede que se rían de vosotros, porque creéis en la fuerza mansa y humilde de la misericordia. No tengáis miedo, pensad en cambio en las palabras de estos días: «Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia» (Mt 5,7). Puede que os juzguen como unos soñadores, porque creéis en una nueva humanidad, que no acepta el odio entre los pueblos, ni ve las fronteras de los países como una barrera y custodia las propias tradiciones sin egoísmo y resentimiento. No os desaniméis: con vuestra sonrisa y vuestros brazos abiertos predicáis la esperanza y sois una bendición para la única familia humana, tan bien representada por vosotros aquí.
Aquel día, la multitud juzgó a Zaqueo, lo miró con desprecio; Jesús, en cambio, hizo lo contrario: levantó los ojos hacia él (v. 5). La mirada de Jesús va más allá de los defectos para ver a la persona; no se detiene en el mal del pasado, sino que divisa el bien en el futuro; no se resigna frente a la cerrazón, sino que busca el camino de la unidad y de la comunión; en medio de todos, no se detiene en las apariencias, sino que mira al corazón. Jesús mira nuestro corazón, tu corazón, mi corazón. Con esta mirada de Jesús, podéis hacer surgir una humanidad diferente, sin esperar a que os digan «qué buenos sois», sino buscando el bien por sí mismo, felices de conservar el corazón limpio y de luchar pacíficamente por la honestidad y la justicia. No os detengáis en la superficie de las cosas y desconfiad de las liturgias mundanas de la apariencia, del maquillaje del alma para aparentar ser mejores. Por el contrario, instalad bien la conexión más estable, la de un corazón que ve y transmite el bien sin cansarse. Y esa alegría que habéis recibido gratis de Dios, dadla gratis (cf. Mt 10,8), porque son muchos los que la esperan.
Escuchamos por último las palabras de Jesús a Zaqueo, que parecen dichas a propósito para nosotros en este momento: «Date prisa y baja, porque es necesario que hoy me quede en tu casa» (v. 5). Date prisa, porque hoy es necesario que me quede en tu casa. Ábrele la puerta de tu corazón.
Jesús te dirige la misma invitación: «Hoy tengo que alojarme en tu casa». La Jornada Mundial de la Juventud, podríamos decir, comienza hoy y continúa mañana, en casa, porque es allí donde Jesús quiere encontrarnos a partir de ahora. El Señor no quiere quedarse solamente en esta hermosa ciudad o en los recuerdos entrañables, sino que quiere venir a tu casa, vivir tu vida cotidiana: el estudio y los primeros años de trabajo, las amistades y los afectos, los proyectos y los sueños. Cómo le gusta que todo esto se lo llevemos en la oración. Él espera que, entre tantos contactos y chats de cada día, el primer puesto lo ocupe el hilo de oro de la oración. Cuánto desea que su Palabra hable a cada una de tus jornadas, que su Evangelio sea tuyo, y se convierta en tu «navegador» en el camino de la vida.
Jesús, a la vez que te pide de ir a tu casa, como hizo con Zaqueo, te llama por tu nombre. Tu nombre es precioso para él. El nombre de Zaqueo evocaba, en la lengua de la época, el recuerdo de Dios.
Fiaros del recuerdo de Dios: su memoria no es un «disco duro» que registra y almacena todos nuestros datos, sino un corazón tierno de compasión, que se regocija eliminando definitivamente cualquier vestigio del mal. Procuremos también nosotros ahora imitar la memoria fiel de Dios y custodiar el bien que hemos recibido en estos días. En silencio hagamos memoria de este encuentro, custodiemos el recuerdo de la presencia de Dios y de su Palabra, reavivemos en nosotros la voz de Jesús que nos llama por nuestro nombre. Así pues, recemos en silencio, recordando, dando gracias al Señor que nos ha traído aquí y ha querido encontrarnos.
1. El Papa atraviesa la Puerta Santa, de la mano con 6 jóvenes
La vigilia inició con el recorrido del Papa a través de la Puerta Santa de la Misericordia, construida para la ocasión, hasta llegar al altar del Campus Misericordiae. Fue acompañado por representantes de los 5 continentes, quienes después se sentaron alrededor de su silla.
2. “El camino hacia Jesús”
Se da inicio a la Vigilia acompañada por 5 escenas de la vida Santa Faustina Kowalska y su camino para seguir a Cristo, así como 3 fuertes testimonios de jóvenes de diferentes nacionalidades que recuperaron su esperanza por la gracia de Dios.
Card. Dziwisz: Jóvenes son esperanza de la Iglesia y del mundo #Krakow2016 #JMJ #acicracoviasrc=twsrc%5Etfw
3. Primera escena: “Fe para los que dudan”
La primera escena presentó el baile de un grupo de jóvenes al interior de una discoteca moderna en la que una de las jóvenes, Elena Kowalska (la futura Santa Faustina Kowalska), se detiene, se aleja del grupo y se vuelve hacia ellos mirándolos con tristeza. La joven queda pensativa y se coloca un velo negro.
Aquí aparece la primera “testigo de la misericordia”, Natalia Wrzesien (Polonia), quien compartió su testimonio de vida. Ella llevaba una vida de supuesto éxito, diversiones, pero no encontraba paz. Acudir al Sacramento de la Reconciliación cambió su vida.
4. Segunda escena: “La esperanza para los que se resignan”
En una pantalla gigante se reprodujeron videos sobre los ataques terroristas del 11 de septiembre, Nueva York y París en 2015, así como escenas de la guerra de Irak y Siria.
La escenificación presenta a siete bailarines que buscan expresar el dolor y la tragedia de perder a sus seres queridos en la guerra. Durante el baile, la joven que representa a Santa Faustina acepta partes de su hábito religioso y la cruz.
5. Tercera escena: “El amor a los que están tibios”
Aquí se presenta el problema de la civilización moderna: los jóvenes que se encierran en sí mismos ante la tecnología. En la escenificación una bailarina recorrió unas paredes transparentes que simbolizan el aislamiento. Detrás de cada una había jóvenes inmóviles utilizando dispositivos electrónicos.
Por último, un joven se da cuenta de la bailarina, sale del cristal y baila con ella. En este punto, la escena se detiene y Santa Faustina canta con lamento.
6. Cuarta escena: “El perdón de los que son culpables”
El tema de la escena es el perdón de los vecinos, el rechazo del mal y la reconciliación. En la pantalla gigante se reproducen imágenes del día en que el Papa San Juan Pablo II fue herido gravemente de bala por los disparos del turco Alí Agca.
En la escenificación Sor Faustina observa la figura del querido Papa Wojtyla sentado junto a su agresor, simulando el día en que el Santo lo visitó y perdonó.
7. Quinta escena: “Alegría a los que están tristes”
El tema de la escena es el dolor que resulta de las adicciones y la monotonía de la vida en el mundo de hoy; así como la alegría ante las dificultades.
Faustina llega a la escena mientras un grupo de jóvenes de prendas desgarbadas bailan hip hop y break dance.
8. La adoración eucarística
Tras finalizar las escenificaciones, el Papa Francisco pronunció un emocionante y extenso discurso, y luego se realizó la adoración al Santísimo Sacramento con meditaciones, cantos que prepararon los peregrinos, acompañados de una orquesta.
Luego la oración en silencio, de rodillas y la Coronilla de la Misericordia cantada por el coro
Me dicen que hay muchos de ustedes que entienden el castellano, así que voy a hablar en castellano. También me dicen que hoy hay un buen grupo acá en esta plaza de recién casados y jóvenes esposos.
Yo cuando encuentro a uno que se casa, a un joven que se casa, a una chica que se casa, les digo estos son los que tienen coraje porque no es fácil formar una familia, no es fácil comprometer la vida para siempre, hay que tener coraje y los felicito porque ustedes tienen coraje.
A veces me preguntan cómo hacer para que la familia vaya siempre adelante y supere las dificultades. Yo les sugiero que practique siempre tres palabras, tres palabras que expresan tres actitudes: tres palabras que los pueden ayudar a vivir la vida del matrimonio porque en la vida del matrimonio hay dificultades.
Ver imagen en Twitter
Ver imagen en Twitter
Seguir
Kraków @krakow_pl
Dziś atmosfera pod «oknem papieskim» nieco mniej refleksyjna! @Pontifex_pl podejmował dialog z młodymi. fot.B. Ś.
20:57 – 28 jul 2016
5 5 Retweets 7 7 me gusta
El matrimonio es algo tan lindo, tan hermoso, que tenemos que cuidarlo porque es para siempre y las tres palabras son: permiso, gracias y perdón.
1.- Permiso: Siempre preguntar al cónyuge, la mujer al marido y el marido a la mujer: ¿Qué te parece, te parece que hagamos esto? Nunca atropellar, permiso.
2- Segunda palabra: ser agradecidos: Cuántas veces el marido le tiene que decir a la mujer, gracias; y cuántas veces la esposa le tienen que decir al marido, gracias. Agradecerse mutuamente porque el sacramento del matrimonio se lo confieren los esposos, el uno al otro. Y esta relación sacramental se mantiene con este sentimiento de gratitud, gracias.
3.- La tercera palabra es perdón: Es una palabra muy difícil de pronunciar. En el matrimonio siempre, o el marido o la mujer siempre tienen alguna equivocación. Saber reconocerla y pedir disculpas, pedir perdón, hace mucho bien.
Hay jóvenes familias, recién casados, muchos están casados, otros están por casarse. Recuerden estas tres palabras que ayudarán tanto a la vida matrimonial: permiso, gracias, perdón. Repitámoslas juntos: permiso, gracias, perdón. Más fuerte, todos: permiso, gracias, perdón.
Bueno, todo esto es muy lindo, es muy lindo decirlo en la vida matrimonial, pero siempre hay en la vida matrimonial problemas o discusiones. Es habitual y sucede que el esposo y la esposa discuten, alcen la voz, se peleen.
Y que a veces vuelen los platos (risas), pero no se asusten cuando sucede esto, les doy un consejo, nunca terminen el día sin hacer la paz.
¿Y saben por qué? Porque la guerra fría al día siguiente es muy peligrosa. ‘¿Y como tengo que hacer Padre, para hacer la paz?’ Puede preguntar alguno de ustedes. No hace falta un discurso, basta un gesto (El Papa se toca la cara dos veces y lo repite), y se acabó, ya está hecha la paz. Cuando hay amor un gesto arregla todo.
Los invito antes de recibir la bendición, a rezar por todas las familias aquí presentes, por los recién casados, por los casados de hace tiempo y que conocen todo esto que ya les dije, y por los que se van a casar.
Recemos juntos un Ave Maria, cada uno en su lengua.
(Ave Maria)
Que los bendiga Dios omnipotente, Padre, Hijo y Espíritu Santo. Y recen por mí, de verdad recen por mí.
¡Buenas noches y buen reposo!
Cracovia. 2016. Decenas de miles de jóvenes venidos de los cuatro puntos cardinales han llegado a la capital polaca para participar, junto al Papa Francisco, en la 31ª Jornada Mundial de la Juventud. Cada uno con su historia, sus ilusiones y preocupaciones.
Guillermo Mijancos, 28 años (España)
«Tocaba la batería en un grupo de música con unos amigos piratas. Eso era para mí ser joven. Vivía para los conciertos de amigos y los disfrutábamos cada fin de semana, enganchado a vivir cada segundo en el escenario… aunque tocar ‘los palos‘ implicaba ser paciente. Terminé arquitectura en Sevilla y emigré a Múnich buscando trabajo. No pude traerme la batería… pero apliqué la táctica de la paciencia y Dios me premió con un trabajo y una novia. Ambos me han ayudado a conocerme: Bea, mi novia, conoce mis defectos y me ayuda a ser paciente, y el jefe me anima a dar lo mejor.
TERMINÉ ARQUITECTURA EN SEVILLA Y EMIGRÉ A MÚNICH BUSCANDO TRABAJO. NO PUDE TRAERME LA BATERÍA… PERO APLIQUÉ LA TÁCTICA DE LA PACIENCIA Y DIOS ME PREMIÓ CON UN TRABAJO Y UNA NOVIA
»Curiosamente esta “paciencia” ante los problemas del mundo es lo que admiro de Francisco. No sé si esto es muy teológico pero me gusta “su paciencia” ante la imperfección de la vida. Me explico: supongo que el Papa podría cansarse antes las faltas ajenas -o de lo que ve de otras personas en la Iglesia- pero es realista con sentido positivo, sin ser agorero o tremendista y me desafía a vivir una vida sencilla, sin caretas. Ademas se juzga primero a sí mismo reconociendo sus errores y luego pide misericordia hacia los demás. Es muy auténtico.
»Admiro esa autenticidad y paciencia del Papa ante la imperfección humana -como mi novia, que me sorprende cada día-… Sí, en un mundo imperfecto me gusta la gente imperfecta con paciencia ante lo imperfecto.
CURIOSAMENTE ESTA “PACIENCIA” ANTE LOS PROBLEMAS DEL MUNDO ES LO QUE ADMIRO DE FRANCISCO. NO SÉ SI ESTO ES MUY TEOLÓGICO PERO ME GUSTA “SU PACIENCIA” ANTE LA IMPERFECCIÓN DE LA VIDA
»Esto me atrae de Francisco y por eso voy a verle a Cracovia. Llegaré en coche el ultimo día para unirme a otros católicos de la calle que buscan un trato auténtico con Dios sin creerse perfectos ni sobradamente preparados. Ahora no tengo mucho dinero guardado –estoy ahorrando para una batería– pero este sábado estaré en Polonia con el Papa. Es tiempo de tener también otras nuevas melodías».
Hilda, 27 años. Hong Kong
«Trabajo en una compañía como contable en Hong Kong, donde han trascurrido los últimos años de mi vida. Nunca he tenido realmente un sueño salvo el vivir el día a día con sentido pragmático para tener futuro.
»En mi ambiente profesional, los jóvenes pasamos mucho tiempo comparando nuestro “estatus económico”, por eso me entristecía la situación cuando cada mañana veía en la calle a jóvenes sin estudios pidiendo dinero.
ASÍ QUE, ANTES DE LA JMJ DE CRACOVIA, TOMÉ LA DECISIÓN HACER UN BREAK EN MI VIDA PARA DEDICARME A LA EDUCACIÓN Y ALMENTORING CON JÓVENES DE LA CALLE, COMO VOLUNTARIA EN BARRIADAS HUMILDES DE HONG KONG
»Así que, antes de la JMJ de Cracovia, tomé la decisión hacer un break en mi vida para dedicarme a la educación y almentoring con jóvenes de la calle, como voluntaria en barriadas humildes de Hong Kong. Me encantará dedicarme a la educación, aunque sé que -siendo realista- veré mucho sufrimiento…
»Espero en Cracovia encontrar la fuerza mental y espiritual para llevarlo a cabo. Sólo tengo una hermana, pero tengo diez tíos maternos y, supongo que -gracias a esta influencia familiar- se ha despertado en mí el sentido de ayudar a otros».
Patricia Tevaga, 20 años. Nueva Zelanda
«Me apasiona la Criminología. El ultimo año y medio estudié materias relacionada con mi futuro para ser detective. Curiosamente -por mis estudios- he visto varios cadáveres y siempre pienso que -lo importante al final- es poder irse al cielo… Bueno, también es cierto que los cadáveres no son lo único que veo… También veo y leo el Evangelio. Hago lo que puedo gracias a la formación que recibo en la Legión de María, fundada por San Vicente de Paúl.
BUENO, TAMBIÉN ES CIERTO QUE LOS CADÁVERES NO SON LO ÚNICO QUE VEO… TAMBIÉN VEO Y LEO EL EVANGELIO. HAGO LO QUE PUEDO GRACIAS A LA FORMACIÓN QUE RECIBO EN LA INSTITUCIÓN EN LA LEGIÓN DE MARÍA
»Vivo en Auclland, capital de Nueva Zelanda, país del rugby y de veleros. Allí, mis padres me han trasmitido la fe en una familia numerosa de ocho hermanos. Es cierto que cuando eres joven no siempre te gusta hacer lo que dicen otros, pero con el tiempo piensas que los consejos familiares no son para cortarte la cabeza, sino para llenarla de abono. Para que germinen buenas ideas. Ideas con buenas obras. Para tener la mejor cosecha de tu vida.
COMO VOLUNTARIA EN LA JMJ SIENTO QUE LAS IDEAS DE MI CABEZA SE ACRISOLAN EN MI CORAZÓN VIENDO AL PAPA TAN CERCA
»Ahora con 20 años ayudo más y acudo mensualmente a visitar enfermos junto a los sacerdotes de mi parroquia. Como voluntaria en la JMJ -y aunque he tardado 35 horas en llegara en avión hasta Cracovia en tres vuelos- siento que las ideas de mi cabeza se acrisolan en mi corazón viendo al Papa tan cerca».
Damian Kosecki, 23 años. Polaco
«Me llamo Damian y junto un amigo español he montado un grupo de músicareggae en Szczezin, donde toco instrumentos de percusión. La verdad es que pensaba estudiar Musicología tras el Gimnasium y el Liceo, pero finalmente decidí comenzar Teología. Y en ello estoy: estudio quinto año de estudios teológicos para ser profesor de religión.
LA VERDAD ES QUE PENSABA ESTUDIAR MUSICOLOGÍA TRAS EL GIMNASIUM Y EL LICEO, PERO FINALMENTE DECIDÍ COMENZAR TEOLOGÍA
»El motivo de mi elección es que Dios siempre ha estado presente en mi vida. Cuando mi madre estaba embarazada, la placenta se desgarró y clínicamente estaba condenado a morir. Sin embargo mi madre dio a luz sin problemas y según el test de Apgar tenía un diez sobre diez. Estaba en perfectas condiciones. Salvo quizá, hoy, por la timidez.
»No estaba seguro si debía venir a Cracovia pero mi novia Paulina me convenció y me ha dado la segunda mayor alegría del último mes. La primera fue aceptar mi petición de matrimonio hace unas semanas para casarnos en mayo de 2017.
SIN EMBARGO, HOY, TAMBIÉN ES UN DÍA TRISTE EN CASA. HOY HE RECIBIDO LA CONFIRMACIÓN TELEFÓNICA DE QUE MI PADRE TIENE UN CÁNCER CON METÁSTASIS Y, AUNQUE NO DEJO DE TENER ESPERANZA, TAMBIÉN YO NECESITO DE ORACIONES
Sin embargo, hoy, también es un día triste en casa. Hoy he recibido la confirmación telefónica de que mi padre tiene un cáncer con metástasis y, aunque no dejo de tener esperanza, también yo necesito de oraciones para el día en que llegue a Szczecin. Me gustaría sentir la comunión de los santos… Gracias por tus oraciones».
Thomas Umiunu, sacerdote, 31 años
«Vivo en Abuja, la capital de Nigeria, y soñé con visitar el país del papa polaco desde que Juan Pablo II visito Nigeria a comienzos de los años 80. Para entonces mis padres católicos pusieron un cuadro del Papa en casa. Yo lo miraba en la esquina de la habitación y gracias a su ejemplo decidí ir al seminario.
QUIERO ENTREGARME A TI Y TÚ ME MANDAS ESTA PRUEBA…, PENSABA. ASÍ QUE FUERON MOMENTO DUROS PORQUE MI PADRE FALLECIÓ Y YO SENTÍA LAS DUDAS DE LA VOCACIÓN
»Por aquellos años mi padre enfermó en el primer año de mis estudios. Yo volví a casa cuando él estaba enfermo. Mis padres, buenos cristianos, me replantearon que regresara en casa. ‘¿Cómo me haces esto, Dios? -Quiero entregarme a ti y tú me mandas esta prueba…, pensaba.
AQUELLA PRUEBA SE SUPERÓ GRACIAS A DIOS Y A MIS COMPAÑEROS SEMINARISTAS. HOY SOY SACERDOTE Y MI MADRE ESTÁ MUY CONTENTA DE MI CAMINO SACERDOTAL QUE YO AGRADEZCO AL PAPA POLACO
Así que fueron momento duros porque mi padre falleció y yo sentía las dudas de la vocación. Aquella prueba se superó gracias a Dios y a mis compañeros seminaristas. Hoy soy sacerdote y mi madre está muy contenta de mi camino sacerdotal que yo agradezco al Papa polaco».
Fuente http://www.opusdei.es/es-es/article/historias-de-la-jornada-mundial-de-la-juventud-cracovia/
Debe estar conectado para enviar un comentario.